
Esta tarde he hecho de azafata en la reunión de la asociación de vecinos de Pedralbes. Parecía una cosa simple, sin duda un trabajo tonto sin ninguna complicación pero muy a pesar de mis espectativas ha requirido una gran concentración y aplicación de mis herramientas de organización. Nos han encargado tomar los datos de todos los asistentes, clasificarlos por calles y tacharlos de una lista general. Además de clasificar a los administradores de fincas y repartir un resumen/ planfleto y papel informativo sobre la asociación. Ha sido entonces cuando he tomado conciencia del trabajo poco remunerando que desempeñan las secretarias y mi falta de capacidad para desarrollar un trabajo que requiera un título universitario. Si tres horas papeleo han podido con mi cabeza no quiero ni pensar lo que como de ser una jornada laboral.
Después de todo, mi agobio y falsa simpatía han valido la pena, ya que: ¿Aquien no le gusta cobrar?
No hay comentarios:
Publicar un comentario